Conocido tanto por sus dos whiskies de malta como por sus mezclas de gran precisión y complejidad inigualable, Nikka nació de una verdadera pasión por el whisky, que Taketsuru descubrió en Escocia. También es allí donde conoce a su esposa Rita, quien lo inspirará y apoyará en la realización de su sueño de producir un whisky auténtico en Japón.